“Creemos en la sustentabilidad, las nuevas tecnologías y una construcción menos invasiva”
Juan Carlos Reyes, gerente general de Patagonia Building Spa
Este fiel representante de la “nueva generación constructora nacional” ha logrado posicionarse exitosamente en el mercado, demostrando que las herramientas de la transformación digital brindan un apoyo decisivo para optimizar la eficiencia, enfrentar momentos de crisis y, al mismo tiempo, dar respuestas concretas y oportunas a consumidores cada vez más exigentes, desde el punto de vista técnico y ambiental.
El mercado de la construcción siempre se ha caracterizado por ser uno de los más complejos del sector productivo. No sólo por su extrema competitividad, sino también por la necesidad de adaptarse a constantes cambios de escenario, en especial desde el punto de vista de la innovación, el uso de las nuevas tecnologías digitales y la sustentabilidad.
Variables que hoy son incluso más desafiantes, en la medida que las empresas deben sobrevivir dentro un contexto de profunda crisis económica y, al mismo tiempo, responder oportunamente a los requerimientos y necesidades de un público objetivo cada vez más crítico y exigente.
Este escenario, sin embargo, no atemoriza al ingeniero en climatización e ingeniero civil mecánico Juan Carlos Reyes Escobar, gerente general y socio fundador de Patagonia Building SpA y Patagonia Trust, dos empresas que representan fielmente el ADN de la “nueva generación” constructora chilena.
Todo cambió, pero no es razón para rendirse
En su corta vida, Patagonia Building ha transitado exitosamente por un complejo camino evolutivo, marcado por hitos como la transformación digital, la pandemia y la revolución eco-ambiental impulsada por las nuevas generaciones millennials y centennials.
“Sabemos que todo cambió, tras la pandemia”, explica Juan Carlos, “pero eso no es motivo para dejar de luchar. Hoy tenemos mayores desafíos y retos, pero sabemos que contamos con las herramientas y el empuje de nuestra gente para sortear los malos momentos y salir adelante”, asegura.
¿Cuáles fueron los orígenes de Patagonia Building?
Esta historia comenzó en un café de Puerto Varas, a inicios de 2016, durante una reunión con mi actual socio, Rodrigo Jonhson, Ingeniero Constructor y que en ese momento se desempeñaba como administrador de obras de una reconocida empresa nacional que ejecutaba proyectos habitacionales en la zona. Entre la conversación y el café surgió de pronto la idea de emprender algo diferente y que diera respuesta a las necesidades de la zona, que estaba abandonada de mano de obra calificada y muy afectada por la centralización de los proyectos, que en general solo se hacían en Santiago. La idea era levantar una propuesta y además buscar gente joven, pero con experiencia en la zona. Al parecer el café surtió efecto, porque nos activó y así fue como nos pusimos a trabajar en este proyecto.
¿De qué forma lograron consolidar su posicionamiento en el competitivo mercado nacional?
Con mucho trabajo duro, ese que solo hacemos cuando somos muy perseverantes. A ello se sumó nuestro profesionalismo, el amor por lo que hacemos, y el respeto a las personas y al medio ambiente. El creer que podemos hacer el cambio desde adentro. Así generamos de a poco los espacios para que cada especialista lograra fortalecer sus especialidades, conociendo el entorno y ajustándonos a la preocupación por el tema climático que es fuerte en esta zona. Respetando además las tradiciones y sumando el calor humano de la gente del sur. Todos esos componentes nos dieron la receta perfecta para generar un clima de confianza entre el mandante y el cliente final. Así también nos fuimos expandiendo poco a poco, hasta llegar incluso a clientes del norte grande.
¿Cómo fueron sus primeros años? ¿Hubo que superar muchos obstáculos y desafíos complejos?
Fueron años duros, porque hubo que romper esquemas establecidos. Además, es difícil generar un marco valórico para una empresa en estos días en que la credibilidad es cuestionada constantemente. Y fue mucho más difícil motivar a jóvenes que no estaban acostumbrados a las lealtades, al compromiso, al trabajo duro, a los horarios exigentes, a estar desconectados y lejos de las grande urbes, y a no ganar siempre una remuneración acorde con sus expectativas. Pero fuimos rompiendo esas barreras, generando confianza en nuestros colaboradores, ganando más espacio y consolidando nuestros valores.
¿Sienten que han madurado entonces, como empresa y equipo?
Somos humildes, pero además sabemos que somos buenos en lo que hacemos, que nos gusta hacerlo y que no tenemos conflictos en sentirnos bien con cada logro o avance que alcanzamos, porque lo festejamos, lo conversamos, lo maduramos y tratamos de mejorar aún más los resultados. Todos aportamos desde nuestras realidades y experiencias para lograr nuestros objetivos. Esa es la clave. Somos un gran reloj donde cada uno es una pieza importante, sin importar la marca, porque lo que nos importa es que demos la hora exacta para quien la necesite.
¿Cuáles son actualmente sus principales líneas de negocio y cómo definirían a su mercado objetivo?
Hoy mantenemos cuatro líneas de negocio: gerencia de proyectos, inspección técnica de obras, gestión inmobiliaria y desarrollo de proyectos de arquitectura e ingeniería. Cada una de ellas nos permite orientar nuestros esfuerzos a un amplio público objetivo, que puede estar formado por inversionistas o empresas de retail, del área industrial, del sector hotelero, educación e infraestructura, entre otras. No estamos cerrados a ningún desafío.
¿En qué regiones de nuestro país ofrecen sus servicios? ¿Cuentan actualmente con una amplia cartera de clientes?
Hoy estamos presentes desde Tarapacá a Los Lagos, con proyectos en Iquique, Viña del Mar, Santiago, Valdivia y Puerto Montt entre otras ciudades importantes. No tememos estar presentes en todo el territorio nacional. Cada región es un gran desafío, pero nuestra experiencia personal nos ha dado la gracia de estar en cada región de nuestro bello país, por lo que siempre estamos buscando donde podemos llegar.
¿Cómo los impactó la pandemia y la actual contracción del mercado, debido a la crisis económica? ¿Hubo que aplicar ajustes muy severos?
La pandemia nos golpeó muy fuerte, y tuvimos fortuna de seguir adelante, porque hoy se ve claramente la gran cantidad de empresas y conglomerados del sector que han quebrado debido a esta compleja situación.
En nuestro caso particular fue una experiencia diferente, porque nos golpeó fuerte en lo económico, ya que las obras y los proyectos bajaron más de 50% y tuvimos que cerrar nuestra oficina recién remodelada en Puerto Varas, que jamás la volvimos a usar. En ese contexto nos “ajustamos el cinturón”, todos, incluyéndonos como dueños, bajamos nuestros sueldos a la mitad, no hubo retiro de utilidades y lo poco que ingresó lo usamos para implementar los nuevos sistemas digitales que tuvimos que usar. Y aquí viene lo diferente, pues aprendimos mucho de nuestros colaboradores más jóvenes, que promedian los 35 años de edad, por lo que tenemos la tecnología a flor de piel. De hecho nuestra evolución de análogos a digitales fue muy rápida gracias a estos talentosos jóvenes cibernautas que nos enseñaron a vivir on line, a hablarle a una pantalla y a dirigir a la distancia reuniones con clientes, colaboradores y proveedores. Además, gestamos otros avances como aplicar tecnología de drones para hacer seguimiento de obras y mostrar sus avances. La evolución fue tan satisfactoria que hoy seguimos aplicando los sistemas aprendidos en pandemia y seguimos mejorando nuestros procesos con ello.
¿Y cuál es su visión del actual mercado inmobiliario y de la construcción? ¿Cómo proyectan 2023 en un escenario que aún proyecta alta incertidumbre?
Muy compleja. La incertidumbre ha crecido enormemente en el gremio, pero sabemos que el mercado se debe estabilizar más temprano que tarde, ya que somos una masa muy grande y la economía del país depende en gran porcentaje de nuestro rubro y los comercios asociados. Creemos que a fines del segundo semestre de 2023 se comenzará a estabilizar lentamente el mercado inmobiliario, se establecerán nuevos valores de construcción y se fijarán en parte los nuevos precios que regirán en los próximos años.
Dada esa situación, ¿de qué manera aspiran a seguir consolidando su posicionamiento de mercado? ¿Tienen proyecciones de crecer dentro del mercado interno mediante nuevos servicios o líneas de negocio?
Nosotros, simultáneamente, seguimos buscando nichos diferentes donde participar, que no sean solamente el inmobiliario del cual somos especialistas. Buscamos en la infraestructura educacional, hospitalaria, industrial comercial, tecnología y minera. Seguimos innovando y aplicando tecnologías nuevas que nos ayuden a sortear este ciclo. Creemos que la vida es un cambio constante donde debemos seguir el avance tecnológico y buscar nuevas formas de hacer las cosas. Este principio ha sido parte fundamental de la comunión que generamos con nuestros colaboradores, el crecer constantemente como personas y profesionales e innovar y desarrollar nuevas formas y tecnologías.
Y en el ámbito de la sustentabilidad, ¿se han sumado a las iniciativas que tratan de impulsar una construcción más sostenible y circular?
Por supuesto, ese es el gran valor agregado de nuestra propuesta. El compromiso con nuestros vecinos, sean animales o plantas. El compromiso con el planeta de dejar un mundo mejor al que encontramos y eso habla de respeto hacia las personas, la vida y la muerte. Creemos enormemente en la sustentabilidad, por eso buscar nuevas tecnologías y desarrollar propuestas menos invasivas que estén acorde con los tiempos actuales y futuros ha sido nuestra característica fundamental. Quizás no nos hacemos llamar una empresa verde y no buscamos ese slogan, porque no creemos en títulos que solo llaman al ego y al marketing. Buscamos ser auténticos, claros y sanos, y por ello actuamos con un compromiso real, no desde una promesa para buscar mundo futuro mejor, sino para hacerlo realidad ahora. Hoy es cuando debemos mejorar nuestros sistemas de tratamiento de aguas y desechos, hoy debemos buscar y aplicar las tecnologías que nos permitan tener el entorno que soñamos.
¿Y qué recomendación le darían a la nueva generación de emprendedores que aspira también a competir en este exigente mercado?
Que crean en lo que hacen, que busquen siempre la forma de hacer lo correcto en toda circunstancia, que se apasionen con sus profesiones dando lo mejor de cada uno, respetando al prójimo sea quien sea, persona, animal o planta, y que sean un aporte real a nuestra sociedad y que disfruten sus logros.